Las pequeñas embarcaciones multicolores se abren paso en el mar cálido y azulino de Pucusana mientras la brisa marina juega en pared con la algarabía de los participantes de la primera regata a remo que parte del Yatch Club. Al otro lado del distrito, doña Domitila camina (porque los carros pasan cada 20 minutos y encima no tiene dinero para el pasaje) sin la menor noción de cuánto tiempo dedica a su diario recorrido desde su trabajo en Pucusana Centro hasta el pueblo joven, ubicado entre los cerros pelados, en el que habita.
“Pucusana tiene un gran potencial turístico que podría ser utilizado todo el año, debido a su clima templado. Está conectado por la carretera Panamericana a una hora al sur de Lima. Posee uno de los escenarios marítimos más bellos del Perú, que no tiene nada que envidiar a otros en el mundo. Sin embargo, el 35% de sus vecinos son pobres y el 3% sufre de pobreza extrema”, explica Marcos Bravo Verde, vecino y amante del distrito, en un expediente que nos alcanza al terminar la Audiencia Pública, que realiza El Comercio.
Jorge Medicina di Paolo, también residente del distrito, hizo su tesis sobre la promoción del turismo marino en Pucusana, la cual ha sido premiada en el extranjero. Una copia le fue alcanzada al alcalde de Pucusana, Pedro Pablo Florián Huari, para su aplicación con el fin de impulsar el desarrollo de la caleta.
Para Marcos Bravo, antes de aplicar la tesis de Medicina, Pucusana debe resolver dos problemas graves: el desabastecimiento de agua y la severa contaminación marina que afectan el distrito.
Asimismo, Bravo recoge iniciativas de otros vecinos amantes del distrito: mejorar las fachadas pintándolas de blanco con algunas partes de azul; y salvar las especies de Pucusana en peligro de extinción, como la nutria marina y el pingüino de Humboldt limpiar la bahía de la contaminación de sólidos, como pilas, bolsas y envases plásticos; controlar la población de perros callejeros, etc.
EL CONVENIO
Bravo considera fundamental que el alcalde Florián haga cumplir un convenio firmado con Sedapal el 17 de diciembre de 1998, durante su primer mandato. Mediante este convenio, explica, Sedapal se compromete a derivar los desagües (hoy bombeados directamente al mar) a una laguna de oxidación, con la finalidad de separar los residuos sólidos para producir fertilizantes y con el agua reciclada alimentar áreas verdes con forestación.
El alcalde Florián manifiesta que está enterado de la petición de Bravo, Medicina y otros vecinos que quieren poner el hombro para que Pucusana recupere el brillo de antaño. Con ellos se reunirá en estos días.
“Respecto a Sedapal, sé que ya se aprobó, cuatro días atrás, el financiamiento de más de 50 millones de soles para dotar de agua potable y desagüe a los asentamientos humanos de Pucusana, por gestión de sus dirigentes. Esas obras incluyen las futuras lagunas de oxidación y el rebombeo de las aguas servidas”, dice.
El burgomaestre refiere que el martes pasado hizo el rendimiento de cuentas de su gestión. Anuncia que todas las semanas desarrollará mesas de trabajo acerca de los problemas distritales. Los temas de seguridad ciudadana y defensa civil serán los primeros en ser abordados.
HISTORIA LOS INICIOS
Los primeros pobladores de Pucusana fueron pescadores de Chilca, quienes se asentaron en la década del 20 del siglo pasado.
SE SUMAN
A partir de 1940 se instalan los nuevos veraneantes provenientes de las clases medias de Miraflores y San Isidro.
NUEVO ROSTRO
Hace poco más de una década, migrantes de la sierra y selva han anclado en los cerros del distrito.